La generación de basuras y el tratamiento que se le viene dando a las mismas es una preocupación que se da a nivel mundial. Según un informe realizado por el Banco Mundial, se determinó que en el 2016 se generaron 2.010 millones de toneladas de basura en todo el planeta. 

Un panorama no muy alentador, ya que, según el mismo estudio, para el 2050 la producción de basuras habrá crecido un 70 %, esto significa que los ciudadanos del mundo generarán 3.400 millones de toneladas de desechos al año.

Ahora bien, la situación se ha vuelto más delicada en Bogotá como lo manifestó en Ciberpleneta  Antonio Porras, subdirector de Recolección, Barrido y Limpieza de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos, UAESP, y agregó que “la ciudad genera más de 7.000 toneladas de residuos cada día, una cantidad muy elevada para la población que reside en el distrito capital”.

A pesar de que la UAESP presta los servicios de recolección, barrido y limpieza a través de cinco concesionarios distribuidos en la ciudad, muchos puntos se han convertido en botaderos y la ciudadanía no ha sido consciente del daño que le causa a su entorno.

“Las personas deben generar hábitos desde sus hogares haciendo la debida separación en la fuente para que así los operadores puedan disponerlos adecuadamente en los horarios y con las frecuencias indicadas en cada una de las áreas de recolección y así puedan ser dispuestos en el relleno sanitario Doña Juana”, resaltó el Subdirector.

La UAESP hace sensibilización con los diferentes grupos de gestión social por medio de estrategias, como la promoción de cultura ciudadana en cuanto al manejo de residuos mediante la correcta separación desde los hogares, a partir del uso de dos recipientes (blanco y negro) para incrementar las toneladas de material aprovechable. 

En bolsa blanca se debe depositar limpio y seco, el material aprovechable como tela, plástico, tetra pack, papel de archivo, metal, latas de aluminio, vidrio y cartón, entre otros. Estos materiales deben ser entregados a los recicladores de oficio.

En bolsa negra deben ir los residuos ordinarios como restos de comida, pañales, papel higiénico y desechos generados por el barrido de su casa, loza, papel y vasos muy contaminados, entre otros.

Este tema es responsabilidad de todos. Cada persona produce cerca de un kilogramo de basuras en el día que, en ocasiones, termina afectando la limpieza de los parques y espacios públicos de la ciudad, contaminando los humedales o quebradas de Bogotá y generando inundaciones, además de mal aspecto visual del entorno.